Una de las más lúgubres maniobras de nuestras democracias es convertir la búsqueda de la verdad en delito y, de paso, hacer creer que las reflexiones que emanan de esa búsqueda sean consideradas subversivas o radicales.
Sabiendo que el futuro es aquello que todavía no puede ser, deberíamos ausentarnos de él, porque caminar por lo inexistente es como pretender ser… antes de haber nacido. (Regalo slogan pro-abortista)