Mi Photosfera:
Tenemos miedo a dejar impresas nuestras sensaciones con un bolígrafo de cristal (la transparencia duele). Y que quien reciba las palabras pueda descubrir a través de ellas los significados de la ausencia, de la profunda emoción, de la resurrección o de la muerte. Una carta puede convertirse en un tatuaje, y dejar marcadas las huellas de la vida.