Una de las más lúgubres maniobras de nuestras democracias es convertir la búsqueda de la verdad en delito y, de paso, hacer creer que las reflexiones que emanan de esa búsqueda sean consideradas subversivas o radicales.
Un afectuoso saludo. Genial la manipulación que hace y sigue haciendo el poder eclesiástico tradicional, pero la belleza es de ella? defines un estadio poético no falto de cambio social , tu creatividad es admirable después de tanto tiempo y sin sabores, salut.
26 diciembre, 2017 en 12:23 AM
Un afectuoso saludo. Genial la manipulación que hace y sigue haciendo el poder eclesiástico tradicional, pero la belleza es de ella? defines un estadio poético no falto de cambio social , tu creatividad es admirable después de tanto tiempo y sin sabores, salut.
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