Pemario Disidente.
(Instante)
Porque el camino del goce no es recto, sino erecto, ven a mi esta noche sin rodeos y avasalla con tu cuerpo mi melancolía. Galvaniza esta imagen antes de que el óxido consienta filtrarse y me depure hasta las ganas de morir sin aliento. Nunca digas en esta tierra no germinaré y, mucho menos, pretendas educar cada ímpetu. ¿Quién no ha sufrido en algún momento la embestida de ese instante? Estar cercado y obligarse a transitar…, despojándose hasta de la voluntad para dejarse embaucar por las sombras y las luces de la vida.