Mi Photosfera
He de empezar a buscar el rostro humano. El paisaje urbano en combinación con sus habitantes.
He de empezar a buscar el rostro humano. El paisaje urbano en combinación con sus habitantes.
No es un sitio que me atraiga especialmente, pero creo que la fotografía tiene el don de poder llevarte en volandas hacia mundos que, al parecer, no se encuentran en el objetivo.
Para quienes podáis disfrutarlo, feliz puente. Yo ya he pescado uno, bien grande
Las procesiones tienen de bueno que muestran aquello que parecía escondido. La política y la religión se dan la mano en esta bella estampa (actual) de Aracena. La fotografía tiene la virtud de estar allí donde no se le espera. Saludos!
Detenerse es un factor determinante a la hora de contar historias con la cámara. Si eres asiduo a determinados sitios y vas conociendo lo que sucede (o puede suceder) alrededor, entonces te apresuras a esperar el acontecimiento. Y muchas veces, llega…
Hay ciudades donde las azoteas son la gran ventana de la casa donde habita uno.
A veces los recuerdos se instalan a las puertas de la memoria. Mi pueblo
Tengo querencia a bajar a este sitio. Imagino que no tiene explicación, más allá de seguir buscando…
Las iglesias al menos nos mantienen entretenidos mirando hacia arriba. Tal vez buscando la luz y la belleza que a veces nos roban en la tierra.
A veces no puedo evitar sacar fotos ni cuando me presento a un examen.
«Enxaneta» es el niño o niña que llena de emoción la finalización de los castells, al subir a lo más alto y hacer el gesto de la aleta para mostrar al público que el castillo está coronado. Luego hay que bajar sin caerse. Seguí su concentración con una curiosidad absoluta; quería atrapar su determinación una vez finalizada la acción, y poder resumir en su mirada el lema de los castellers: fuerza, equilibrio, valor y juicio.
Siempre hay un árbol solo, en todas partes, y tendemos a abrazar su presencia como si de otra persona se tratara.
Admirar cómo se las puede gastar un cuervo con sus triquiñuelas es mucho mejor y más entretenido que ver cualquier telediario.
Cuando la vi me resultó una extraña pieza que no sabía qué hacía allí. Al rato empezaron a entrar y salir abejas como Pedro por su casa. Cogí una silla, la cámara, y voilá… Maravillas de la naturaleza.
20 años han pasado ya. Viví su construcción con una curiosidad infinita. No había forma de saber qué iba a surgir dentro de aquella estructura. Sigue imponente (controversias culturales aparte).
(si quieres disfrutar de la proyección «Reflections» que se ha realizado estos días para la conmemoración…, abajo el vídeo)
Hay que procurar sorprender al final, e intentar dar un poco de sentido a la obra, para que deje tiempo a reflexionar.
Generalmente, en la raíz de tus primeros recuerdos, está el nudo que tienes que comenzar a desatar…
Toda obra ha de comenzar con una primera puesta en escena, y en la vida también, toda aproximación ha de comenzar con una buena presentación.
Al final va a ser verdad; que el cartero siempre llama dos veces
Esta noche he soñado que dios venía a mi (vete tu a saber por qué) y me preguntaba qué tal estaba el mundo. No sabía cómo responderle y me he hecho una postal, para que tengan bien claro en los cielos cómo están los tiempos aquí bajo sus efluvios.
(Me da que está haciendo una encuesta, y espero que cuando te pille, no se te ocurra tergiversar la historia y hacerle creer que todo va bien para que te de una parcela cerca del refugio donde descansa).
Retrato, del latín retractus, es la pintura, imagen o representación de una persona. El retrato más frecuente tiene una expresión plástica (una pintura, una fotografía o una escultura) que imita a la persona real. La intención es reproducir con la mayor exactitud posible el aspecto físico y la personalidad del sujeto retratado.
Creo que falta algo en la definición!
Te llevan al huerto y te encuentras con un regalo. Gracias amigo, por desplazar mi mirada a un mundo de color.
Todo parece indicar que el caballo ha cambiado de sitio, pero en realidad es el sitio quien ha cambiado de caballo.
(para entender el desaguisado, entrar aquí)
Los habitantes que miran a la mar no saben desprenderse de ella, porque su olor es como aquel perfume que nunca podrás olvidar.
…y no son electromagnéticas!
Por debajo del umbral de la conciencia hay un desfiladero que debemos atravesar para reformular el camino al encuentro de nuestra verdadera identidad.
Lo que la naturaleza puede dibujar que no lo evapore el hombre!
Muchas veces tengo «la manía» de esperar lo que haga falta para que en mis fotografías no aparezca nadie. El antropocentrismo me saca de mis casillas. Gente hay por todas partes, y quiero decir bien alto que la posición central del ser humano en el cosmos, es solo eso, una posición, por cierto, completamente dislocada.
Sobre todo en Occidente!
Sobre el fiordo de arena (Sandefjord), a veces el cielo quiere ser también protagonista de su propia historia.
Medito llevar esta imagen al próximo certamen o concurso de «Realismo Social». Si alguien conoce alguno, que me lo haga saber.
La foto está tomada en Jaén. Y la verdad, nada que objetar.
Me gustan los ríos que van a dar a las arboledas…, y convierten sus orillas en acuarelas.
El desprestigio de la vida a veces se soluciona con un paseo.
15- Después de ver el espectáculo regresan al hogar. Y hasta aquí esta etapa, que espero haya dibujado mi mirada sobre otros inviernos y otro despertar.
14- Otra escultura del parque de Ekerberg. «Venus de Milo aux tiroirs», de Salvador Dalí. Fue el día de reyes, a las cuatro menos cuarto de una tarde fría, muy fría, y vinieron sí los pajes y trajeron un poco de arte, silencio y emotividad…
13- Un carámbano es un pedazo de hielo en forma de cono que se forma cuando el agua que gotea de un objeto se congela por efecto de la helada. Muchos carámbanos… no son multitud…
12- La mitad hielo la mitad agua. El sol se empeña, pero esta noche volverá a perder la batalla…
11- Rodin siempre me pareció un escultor de invierno. En este parque de Oslo tiene también su hueco, y su atmósfera… «Eva tras la expulsión».
10- El sol se ha ido hace un buen rato. Quedan sus últimos versos hechos imagen y un poco de hechizo. Este invierno es colorido desde Noruega hasta mis pies.
09- La última bola perdida de la navidad.
08- Cada trozo tiene su densidad, y deja pasar su luz, y el cielo azul adquiere diferentes tonos sobre mi pupila glacial.
07- Se acaba de ocultar la luz del sol. Comienza una nueva y cautelosa noche de ambar, silencio y atención. Tu refugio es el mio…
06- Cuando en el Mediterráneo la nieve llegó al mar, sus habitantes despertaron y se frotaron los ojos. En el Mar de Noruega es una estampa cotidiana, pero no por ello menos bella…
05- Ninguna pisada. Nadie quiere lanzarse a las gélidas aguas, pero yo me quedo allí, buscando toda ausencia y la quietud de la belleza.
04- «Todos vivimos bajo el mismo cielo, pero no todos podemos ver el mismo horizonte»
Ésta inscripción la vi en un parque frente al mar en Larvik, Noruega. A muy pocos kilómetros de allí me quedé con esta imagen, el mismo día, el mismo atardecer…, y recordé las palabras y guardé para siempre las sensaciones.
03- Las cadenas del frío también saben guardar su memoria. Cinco y cuarto de la tarde. Es ya de noche y se enciende la luz.
02- La superficie fragmentada y helada solo puede reflejar una inmensa roca de forma borrosa, pintando el agua sin técnica alguna.
01- La espuma de las olas se convirtió en una blanca capa. Y la playa, para nosotros sinónimo de calor y chapuzón, se transformó en una nueva obra artística del frío. El proceso es lento, casi sin corrientes, en ligeros movimientos el agua ya helada se va depositando al final de su recorrido y duerme en la arena, vistiendo ésta con láminas superpuestas que a miles organizan ese bello manto a diez grados bajo cero. Cada vez me gustan más el invierno y la soledad, esa sensación de abandono voluntario y retiro, rodeado de belleza y continuas contradicciones…
Todos los elementos de la naturaleza insisten una y otra vez en que detengamos nuestra particular guerra con ella. Pero nosotros ahí seguimos, dándole la espalda, pensando que con las redes sociales y las nuevas tecnologías vamos a ser capaces de darle un giro a nuestro comportamiento. No somos más torpes porque no podemos…
Me costó averiguar en qué consistía. Su finura, su extremada delicadeza, su fragilidad y su tacto son muy extraños. Y al tocarlo, se encoge, reaccionando a la violenta intromisión del hombre. Su vida al borde de los caminos y de la humedad es muy corta. Pero su belleza es extraordinaria. Una seta estéticamente alucinógena…
Lo leí un día en el muro de una amiga desconocida pero que siento próxima. Tiene la costumbre de invitarnos a ver sus fotos… y sus palabras. Yo atiendo siempre mucho a las palabras. Y le escribí diciendo que las suyas, las que acompañan sus imágenes, suelen ser normalmente bellas, y que daba gusto leerlas así.
Le pedí permiso para apropiarme de unas pocas, pero eso si, para que abrazaran una imagen mía que con su reflexión quería crecer…
Aquí os dejo mi fotografía, enmarcada perfectamente con su voz
Dijo así: «La fotografía es la manera más elocuente de escuchar el silencio»
Debe estar conectado para enviar un comentario.